Dimensiones del ser humano

*      Dimensión física.

El desarrollo físico individual pasa por una serie de etapas como son: los cambios sensoriales, el paso de niño (a) a adolescente, de adolescente a adulto, de adulto joven a adulto mayor, esta serie de retos requieren que se realicen algunos ajustes y que se definan nuevos papeles sociales y condiciones biológicas por ejemplo: el retiro, los cambios en la actividad psicomotora y las pérdidas que acompañan las distintas etapas del ciclo de vida; todas estas variables se investigan dentro del ámbito de salud para realizar cambios en situaciones no deseadas para mejorar el área física del ser humano.

En el área física se pueden examinar algunas conductas de riesgo como son: prácticas asociadas con servicios de salud, régimen de medicación, higiene, condición física, abuso de tabaco y alcohol; así como las destrezas de adaptación y conductas de salud positiva como patrones de respuestas a estímulos positivos, los cuales se pueden obtener con el conocimiento sobre promoción de salud, redes de apoyo, actividades vocacionales, recursos mentales y espirituales.

*   Dimensión social. 

La Dimensión Social se refiere a  la habilidad de relacionarte con otras personas. Se obtiene mediante una comunicación que implique una escucha activa, así como la puesta en práctica de actitudes asertivas y empáticas con los demás.

Enfatiza en la diversidad de aspectos que permiten a la persona interactuar con otras personas, para lo que son esenciales la existencia de otros con conciencia de sí mismos, el lenguaje y la intención de comunicar. Es un componente esencial para la vida y el desarrollo humano al resultar imposible ser humano en solitario.

 

La persona nace en una sociedad (antes de nacer ya se está condicionado por una variedad de aspectos sociales, por ejemplo, las costumbres que marcan cuales son los patrones adecuados de comportamiento respecto a la elección de pareja o el embarazo) y necesita vivir en sociedad, ésta favorece la adaptación al medio, lo que le multiplica las posibilidades de sobrevivir. Nace de otras personas y requiere la presencia de otras personas para sobrevivir, llegar a ser ella misma en todos sus extremos y vivir una vida plena.

 

 

 

*   Dimensión Emocional.

La dimensión afectiva se refiere, como su nombre lo indica, a todas las emociones y sentimientos que experimentamos.

La salud emocional es de vital importancia para lograr la armonía y el equilibrio que se requiere para obtener una adecuada calidad de vida.

Existe una relación directa entre ética, valores y salud afectiva. El objetivo de toda búsqueda humana es la felicidad. La felicidad individual es tan importante que incide en la armonía social y de ésta depende en gran parte la paz social.

La felicidad implica sentir emociones positivas y poseer salud afectiva.

La felicidad es una sensación profunda de plenitud que no depende de factores externos, la felicidad es un estado mental que se cultiva y se aprende mediante emociones y actitudes  positivas.

Existen varios tipos de emociones positivas: alegría, regocijo, gozo, excitación, admiración, amor, armonía, calma y sosiego.

La emoción positiva por excelencia es el amor, la dimensión afectiva puede cultivarse a través de actitudes y conductas positivas, es decir, a través de valores.

 

*   Dimensión Intelectual.

Los conocimientos y alcances logrados por el intelecto se deben a la superación personal por querer aprender y lograr mucho más en la vida, existen además características que son importantes tales como, físicas: presentación personal, salud, simpatía; intelectuales: iniciativa, imaginación, memoria, atención, conocimiento; éticas y morales, dignidad, honradez, responsabilidad; sociales, cortesía, tolerancia, empatía, buen humor; emocionales, autocontrol, persistencia, confianza en sí mismo.

 

*   Dimensión sexual.

Comprende aquellos aspectos que desde el punto de vista físico y orgánico tienen que ver con la expresión sexual. Se integran en ella, por tanto, distintos aparatos y órganos regidos por el cerebro que, tras recibir información desde los órganos de los sentidos, elabora la respuesta sexual humana. Los órganos de los sentidos (vista, oído, olfato, gusto y tacto) son parte esencial de esta dimensión así como la piel, que en su totalidad constituye el mayor órgano sensorial sexual y es considerada, junto con las mucosas, un agente erógeno de importancia capital. Los órganos genitales, que se integran en esta dimensión, a menudo han monopolizado todos los aspectos placenteros de la sexualidad en detrimento del placer proveniente de otras zonas corporales como la piel. Esto, que es muy evidente en el hombre, no lo ha sido tanto para la mujer, en quien se reconoce una gran sensibilidad de las zonas no genitales (piel y mucosas sobre todo), lo que la hace más sensible a estímulos táctiles como besos y caricias.

Cada persona va perfilando a lo largo del tiempo una actitud propia sobre la sexualidad, que será facilitadora o inhibidora de su expresión según sus propias experiencias, las referidas por otras de su entorno, el ambiente social y cultural en el que está inmersa, su formación y su información, sus creencias religiosas, etc.

En los últimos años, algunos expertos señalan una nueva dimensión en la sexualidad, la medioambiental, movidos por la certeza de que los factores medioambientales influyen de manera clara en ella. Estos cambios provocan modificaciones diferenciales en la sexualidad de los seres vivos, y la interdependencia entre éstos y el ambiente es la base de la evolución y de la biodiversidad.

 

*   Dimensión espiritual.

La existencia en todas las culturas de valores estéticos, religiosos, morales y espirituales, es la prueba más evidente de lo que convencionalmente se denomina la dimensión espiritual de los seres humanos. Esta dimensión en algunas personas o culturas se cultiva muy poco, más aún, se tiene relegada a un segundo nivel, es el caso, por ejemplo de los planes educativos que desafortunadamente hoy no tienen en cuenta esta dimensión para el desarrollo integral humano. Pero esto no quiere decir que tanto los padres de familia, maestros y estudiantes no sueñen que la educación, a través de los procesos educativos los abra a los valores espirituales y entren éstos a los valores trascendentales en las respectivas culturas. La dimensión espiritual del ser humano es una prioridad que ha de tenerse en cuenta entre las dimensiones del desarrollo integral, debe ser el gran propósito de toda buena educación.

 

La formación espiritual lleva necesariamente a la formación ética, morales, estéticos y religiosos. Esta dimensión del hombre, que se expresa por la necesidad y por la apertura a valores universales, a creencias, doctrinas, ritos, convicciones para un que se dé un sentido total y profundo a la experiencia de la propia vida y desde ella a la del mundo, a la historia y a la cultura. Con la vivencia de la dimensión en mención se da el sentido a la historia personal y social y por ende el destino humano en la historia, como también le surgen interrogantes tales como el sentido del amor, el dolor y de la muerte.

 

La dimensión espiritual se hace presente en los contenidos de la conciencia moral, espiritual y religiosa. La conciencia es la intimidad humana, es decir, su interioridad, no es sólo la conciencia psicológica, sino sobre todo conciencia moral y espiritual, es el núcleo más recóndito, es como el santuario del ser humano. El santuario donde nadie puede penetrar a no ser un guía espiritual, o amigo de muchísima confianza, que sean leales y fieles, que pueden mirar lo más hondo de un ser humano, la conciencia, es donde se formulan los más grandes interrogantes e inquietudes más profundas de las personas que evidencian y caracterizan su espíritu y su necesidad espiritual para la misma. Se trata del mundo interior de la persona, donde a veces el ser humano se siente muy bien y otras veces muy mal. Las grandes satisfacciones o insatisfacciones acontecen en este mundo interior.

Contacto

Taller de Desarrollo Humano
pacheco_meme@hotmail.com
Tuxtepec
68363

2781142762

© 2016 Todos los derechos reservados.

Crea una web gratisWebnode